La respuesta es si, sobre todo si la exigencia empieza a ser considerable. Algunos de los motivos por los que deberías mejorar tu condición física serían:
Te vas a divertir más: La ejecución los golpes de padel requieren de la capacidad de reacción inmediata, en milésimas de segundo. Hay que llegar perfectamente a la bola, posicionarte y ejecutar tu golpeo. Si lo haces correctamente, existe un alto porcentaje de éxito y por siguiente, esto se traduce en más diversión.
La preparación física previenes y evitas lesiones. Si tu cuerpo está adaptado y entrenado, tu capacidad de realizar movimientos y resistencia será mucho mayor. Esto te evitará lesiones y fatiga a lo largo de la temporada y te dará continuidad y seguridad en tu juego. Podrás mantener un nivel constante y regular en tu juego.
Deporte de calidad: el hecho de tener un mejor condición física te hará disponer de movimientos mucho más rápidos y explosivos, mejorarás tu velocidad, agilidad, fuerza, coordinación, flexibilidad y resistencia. En definitiva, practicarás padel con más calidad.
¿Cómo entrenar cuando eres un jugador iniciado en padel?
Si empiezas a jugar a padel, para ponerte en forma, sería recomendable que compaginaras con el juego un entrenamiento aeróbico, para trabajar tu resistencia. Puedes hacer algo de running, bicicleta o incluso algo de natación. Si tienes posibilidad de ir al gimnasio, puedes realizar ejercicios para aumentar tu resistencia muscular, fuerza y flexibilidad.
¿Cómo entrenar cuando eres un jugador más experimentado?
Poco a poco tu nivel irá en aumento y por consiguiente tendrás que realizar un entrenamiento mucho más específico. No solo deberás realizar entrenamientos de resistencia, fuerza y flexibilidad sino también deberás realizar una serie de entrenamientos funcionales, adaptados exclusivamente al deporte del padel.